lunes, 31 de agosto de 2020

Al borde del precipicio

Al borde del precipicio volvemos, 
y con tristes miradas, condenados, 
inclinamos nuestras 
cabezas una y otra vez.
 Nos levantamos, seguimos el sendero 
y como corderos al matadero,
somos llevados día a día 
donde por siempre 
nuestras almas morarán. 
Somos animales aterradores, 
la evolución de una sociedad 
que camina entre las ruinas
de las colinas apagadas. 
Hoy a ambos lados de la tumba 
nos concentramos todos, 
contemplamos espantosos momentos 
frente al ataúd vacío;  
somos el mensaje del espanto,
la fruta del árbol prohibido 
y del futuro venimos arrasando 
vuestro torcido pasado 
dejando pueblos en cenizas 
para que entre ellas broten 
las caras enviadas al olvido.


Luis NSUE MIA
 31 de Agosto 2020

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